¡Buenos días!
Ayer domingo 22 fue un día dominado por el miedo y los nervios. Al levantarnos se concretaba el rumor que venía corriendo por el campamento desde la llegada: la Noche del Terror sería “un día de estos”. Y ayer fue. Sin embargo, hasta las 11 que empezó el recorrido... hubo mucha tela que cortar. Vamos al lío:
Ayer domingo 22 fue un día dominado por el miedo y los nervios. Al levantarnos se concretaba el rumor que venía corriendo por el campamento desde la llegada: la Noche del Terror sería “un día de estos”. Y ayer fue. Sin embargo, hasta las 11 que empezó el recorrido... hubo mucha tela que cortar. Vamos al lío:
Tras el desayuno, la primera actividad para los grupos 1-4 fue realizar un portavelas hecho con pasta das que dentro de unos días pintarán. Mientras tanto, los grupos 5-8 estaban con las actividades especiales como tiro con arco, pesca, rocódromo, equitación o la salida en bicicleta que hizo el grupo 5.
Por otro lado, ayer inauguramos una actividad matinal más. Desde ayer, cada día un grupo verá dos capítulos en inglés de alguna serie, siendo los grupos 5 y 6 los primeros.
Durante el tiempo libre y de piscina siguieron los torneos deportivos. Entre ellos ayer se jugaba la final de ping-pong, disputada entre David Busta y Javier Mata, siendo David Busta el que se llevara finalmente el gato al agua, coronándose campeón.
Tras la comida, ensaladilla rusa y carne asada con patatas, en la hora de talleres los grupos 5-8 decorarían una camiseta decolorándola con lejía, una camiseta que les servirá de recuerdo de su campamento con itinerancia. A continuación, mientras las camisetas secaban, una minisesión gastronómica, haciendo trufas de chocolate que serían parte del postre de la cena.
Los grupos 1-4, además de las trufas tuvieron un taller de malabares, en el que fabricaron pelotas con las que poder iniciarse en ese divertido mundo.
El juego de la tarde, compuesto por 10 pruebas de habilidad y risa en el que los grupos competían de 2 en 2, nos dejaría momentos verdaderamente graciosos que pronto subiremos. Entre las pruebas: pirámides de vasos, mover huevos con cajas de pizza, encestar zapatos...
Sin embargo, la prueba estrella fue el Idiotizador. Y es que en un campamento en el que convivimos tantos y tanto tiempo, hay que saber reírse de uno mismo.
La prueba consistía en cantar una canción con la pequeña dificultad de llevar puestos unos auriculares en el que se oían a sí mismos, con 1/10 de segundo de retardo. Lo mejor es verlo, así que pronto estarán subidos aquí mismo una serie de vídeos...
Por la noche, con los primeros que llegaban al comedor empezaban a oírse gritos de alegría, creemos que las hamburguesas con patatas que hubo para cenar tuvieron bastante que ver, pero seguimos investigando...
Y por fin, llegaba el momento más esperado del día. Se notaba la tensión en el ambiente. Así que a las 11 y desde el bosque, el grupo 1 comenzaba el recorrido que todos los grupos irían completando.
El objetivo se cumplió. Los niños llegaron asustados aunque pasándoselo bien pese a todo.
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