Buenas noches, ¿cómo están?
Tras dos días complicados, en los que la climatología nos hizo cambiar los planes por fin el tiempo nos ha respetado y hemos podido seguir nuestro campamento, que ya está en los últimos compases, a la perfección.
Tras otra noche en la que nuestros niños de itinerante tuvieron que dormir en el campamento, por la mañana, tras desayunar y preparar de nuevo sus mochilas, se dedicaron a montar todas las tiendas en el campo de fútbol del campamento, para comprobar que estaban bien tras la tormenta y aprovechar el calor para que secasen.
Tras otra noche en la que nuestros niños de itinerante tuvieron que dormir en el campamento, por la mañana, tras desayunar y preparar de nuevo sus mochilas, se dedicaron a montar todas las tiendas en el campo de fútbol del campamento, para comprobar que estaban bien tras la tormenta y aprovechar el calor para que secasen.
Mientras tanto, los grupos 1-4 realizaban más actividades dentro de su rotación. Además de éstas habituales, el día de hoy era especial, pues uno de los talleres y actividades era la pizza. Los chicos y chicas de 1º y 2º ESO hoy emplearon parte de su tiempo en realizar una pizza desde cero, para cenarla por la noche.
Durante el tiempo libre y de piscina, dado que el calor no apretaba tanto, unos cuantos monitores y niños aprovecharon para jugar unas pachangas de fútbol y voleibol, continuando los partidos del día anterior.
Tras la comida, pasta con tomate, lomo con patatas y nectarina, y el taller de pizza, el juego de la tarde era el Cluedo, uno de los platos importantes de nuestros campamentos, que por la climatología hemos ido retrasando hasta el día de hoy, que por fin hemos podido jugarlo sin problemas. Así, durante la tarde y la noche, los grupos han ido realizando una serie de pruebas que bien realizadas les proporcionaban una serie de pistas para poder descubrir quién, dónde y con qué hechizo había matado a nuestra Hermione Granger, una de las protagonistas de nuestro Cluedo de Harry Potter de este año.
Así, con nuestros itinerantes acampados sin problemas de ningún tipo y con los más pequeños luchando por resolver el Cluedo, pasaba otro día por Saldaña. Y realmente queda muy muy poco, pero aquí estaremos hasta el final.
¡Saludos!
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