En la segunda parte, y habiendo hecho los cambios, el juego e intensidad siguió siendo el mismo, prueba de ello que en los primeros cinco minutos de la segunda mitad, habían marcado otros tres tantos, 12-1. Bajando bastante la intensidad de la presión y del juego local, intentaron crear jugadas desde atrás, teniendo aún bastantes ocasiones para que el resultado fuese más abultado aún de lo que fue, 15-1. 

Esta vez no ocurrió como en otros partidos y el colegio pudo llevar por momentos cierta iniciativa en el juego, aunque fue siempre un partido muy trabado por parte de ambos conjuntos que no llegaban a elaborar ninguna jugada. Sin embargo el infantil del colegio tenía más velocidad algo que, gracias a los saques en largo desde la portería, aprovecharon para crear contras peligrosas a sus rivales. Balones largos, rapidez arriba y siempre faltaba algo, un remate...

Por su parte, los visitantes obtuvieron demasiada recompensa cuando un balon golpeado desde la frontal del área bajó rápidamente del cielo dejando el 0-1 con el que se llegaría al descanso. Gol evitable aunque quedaba la segunda parte intentar cambiar las cosas. 

Los primeros minutos transcurrieron sin mucha precisión en los pases tanto en uno como en otro equipo... hasta que en una de las contras antes mencionadas llegó el gol de Enol que supondría el empate y creaba expectativas de victoria para los locales. Con un rival más atormentado en defensa y la presión colegial llegaríamos hasta los últimos minutos de encuentro. Y cuando estaba más cerca el gol para el colegio un centro de los visitantes desde la banda se pasea por delante de muchos jugadores en el área hasta que un jugador local, en un intento de despejar el balón, consigue un autogol en el último minuto que dejaba caras largas a todo jugador blanco. Mala suerte.. quizá cierta injusticia aunque de todo se ha de aprender.